La revolución en el
marketing viene de la mano del “branding”. El modo de destacar un producto
entre todos aquellos que recibe el cliente es a través de los valores que una
marca representa.
Branding: proceso de
creación de una marca, en donde se destacan valores y conceptos relacionados
con un modo de vida concreto, con una forma de sentir, vivir y pensar. Tiene
que ver con la identidad de una marca. Empresas como Nike, Microsoft o
Coca-Cola no sólo ofrecen productos, sino un concepto determinado, actitudes e
ideas concretas.
Las marcas deben
establecer una conexión emocional con el cliente. El branding se dirige a los
sentimientos, a los deseos más profundos. De este modo, muchas marcas se han
convertido en auténticos iconos culturales donde se reflejan los gustos y
apetencias de los ciudadanos.
A partir de los años
80, el éxito de las empresas se localiza en una buena estrategia de marketing,
basada no tanto en las propiedades del producto, como en la transmisión y
producción de valores para la marca que se quiere comercializar.
Las marcas logran
fascinar al público en general porque ofrecen a los consumidores un valor
adicional aparte al que el producto, servicio o compañía pueda aportar, y que
se convierte en la primera motivación de la gente para querer un producto. Pero
no está tan claro qué es exactamente ese valor o cómo se logra incorporar a la
marca.
Bibliografía: La dinámica de la comunicación masiva,
dominick joseph r., editorial, mc graw hill, octava edición.
No hay comentarios:
Publicar un comentario