Internet se presta a las difamaciones, su propagación,
anonimato y transnacionalidad permiten ser injuriado a mayor velocidad que en
cualquier otro medio o plataforma de comunicación. La blogosfera hispana, las
redes sociales y la cultura del gatillo fácil tan implantada en nuestro país
deja cada año a una larga lista de víctimas de contenidos perjudiciales.
Si ha sido atacado o difamado a través de un sitio web es
importante adquirir la visión de que su principal objetivo será el de evitar
una mayor propagación, el defenderse de manera adecuada ante la fuente del
contenido y el de restituir su nombre o marca mancillado en los motores de
búsqueda.
- Evitar climas pasionales que pudieran dar lugar a crear “mayor bombo” al conflicto, es frecuente que el afectado por una difamación se deje arrastrar por su propio instinto de autodefensa arremetiendo y declarando ante la parte contraria.
- Evite replicar en el mismo sitio web del atacante (nunca entre en casa del enemigo) pues empeorará todo además es posible que el sitio web gane relevancia y consiga una mayor propagación.
- Ignore al troll (término utilizado para referirse al provocador y/o difamador) es frecuente que el autor de un ataque busque una respuesta o protagonismo a su provocación, si le replica aumentará su protagonismo ya que conseguirá el resultado esperado, la ignorancia es el mejor castigo para un provocador. Si hace referencia a él se sentirá reconfortado y habrá conseguido atraer su atención, nunca transmita su relevancia al autor de un contenido perjudicial.
- No inicie acciones legales, si amenaza legalmente el atacante aprovechará para auto personarse ante el resto de su comunidad como una víctima de una persecución legal y/o ideológica. La experiencia demuestra que las acciones legales no suelen ser muy eficaces en el escenario de Internet. Recurra a esta solución únicamente en aquellos casos en los que el contenido vertido pueda ser claramente delictivo.
- Recuerde que todo conflicto es gestionable, póngase en contacto con un profesional de la reputación digital para que le ayude a trazar una estrategia orientada a la reparación de identidad ante los motores de búsqueda.
Bibliografía:
La dinámica de la
comunicación masiva, Dominick Joseph R., Editorial, Mc Graw Hill, octava
edición.
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