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Somos una empresa dedicada al Monitoreo de Medios Masivos,
nosotros nos encargamos de monitorear publicidad, noticieros, prensa, radio, y televisión, analizando si el cliente así lo decide la información que se le transmitirá.

Contamos con monitoreo publicitario, noticioso, político, radiofónico, de frecuencia, simultáneos, y una amplia gama de servicios que pueden ser entregados en amplia gama de dispositivos de almacenamiento.


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miércoles, 27 de junio de 2012

Video On Demand (VOD)


En los últimos años se han producido muchas novedades en el mundo de los medios de comunicación y, en concreto, en la radiotelevisión; cambios como el desarrollo de redes de cable de fibra óptica en todo el mundo y, en ciertos países, el establecimiento de programas de pago de todo tipo de géneros, sin olvidarnos de la expansión de la tecnología e infraestructuras por satélite y la calidad de la imagen digital de alta definición en las grandes pantallas.

Por consiguiente, los usuarios disponen cada vez de más alternativas. El cable digital y las tecnologías alternativas permiten a los consumidores enviar señales con respuesta a los proveedores de programas, abriendo con ello nuevas posibilidades. La integración del ordenador como medio de ocio y la nueva generación de pantallas de televisión se han unido a la emisión de señales con respuesta. En consecuencia, se ha desarrollado la interactividad total en línea y un auténtico Video On Demand (VOD), que da a sus usuarios la libertad de encargar cualquier tipo de película o programa en cualquier momento y desde su casa.

Estos sistemas son un gran desafío para las tiendas de vídeo locales, ya que los usuarios tienen un acceso garantizado e incluso pueden ahorrar los costos del trayecto hasta la tienda.

La televisión digital interactiva o el llamado VOD ha pasado de ser una fantasía a una auténtica realidad.

El Video On Demand se define como vídeo a la carta. Este sistema, más desarrollado en Estados Unidos que en Europa, permite al usuario solicitar y visionar una película o un programa concreto en el momento exacto que el espectador desea, ofreciéndole a su vez el uso de funciones de video. Es decir, el cliente mientras ve la televisión digital puede detener el programa que ha pedido, también puede llevarlo hacia atrás, hacia delante, ponerlo a cámara lenta.

De esta forma, nos encontramos ante un nuevo cambio de institución, tanto para los demandantes como para los productores, y consecuentemente surgen nuevas formas de consumo.

El primer servicio comercial de VOD se realizó en Hong Kong alrededor de 1990. Sin embargo, este servicio fracasó al poco tiempo por dos motivos fundamentales: en primer lugar, porque los CD-s eran mucho más baratos; y, en segundo lugar, porque la televisión de pago no era común en Hong Kong. Por ello, Hong Kong Telecom perdió una gran cantidad de dinero y, en consecuencia, VOD fue adquirido por el Pacific Century Cyberworks en el año 2000.

Actualmente, los servicios que ofrece VOD están disponibles en todas partes de EE.UU. y los proveedores son las grandes empresas de cable o ADSL que transmiten películas y programas de televisión. Los usuarios de este sistema pueden hacer pausas, rápidos avanzados y rebobinados de las películas que ofrece VOD.

La distribución de una sola señal es poco práctica para la mayoría de los sistemas de TV por satélite. Sin embargo, EchoStar ha anunciado recientemente un plan para ofrecer los programas de VOD mediante el registro automático de dichos programas sobre el PVR. De esta forma, los usuarios pueden manejar a su conveniencia los productos audiovisuales más fácilmente. De hecho, el uso de VOD se ha convertido bastante común incluso en algunos hoteles de lujo.

En definitiva, los servicios de VOD están extensamente disponibles en EE.UU. y en menor medida, en Francia y UK.

Bibliografía: La dinámica de la comunicación masiva, Dominick Joseph R., Editorial, Mc Graw Hill, octava edición.

lunes, 25 de junio de 2012

Los que dicen: Judy McGranth


Para mucha gent , Judy McGranth parece tener el trabajo  que todo mundo sueña. Ella es presidente de la MTV Networks Music Group y es responsable  de todos los medios  digitales de la compañía. Bajo  su cargo, MTV ha  pasado a ser una marca internacional que simboliza una actitud única  y estilo de vida.

Siempre fanática de la música primero trato de conseguir trabajo como redactora para Rolling Stone. 
Cuando  todos sus esfuerzos no sirvieron de mucho, se fue a escribir frases publicitarias y empezó a trabajar para Mademoiselle  y Glamour.

Judy McGrath transformó la cadena MTV desde que esta última era insignificante hasta el gigante de hoy en día 17 mil millones de dólares. Para ello tuvo que elaborar una nueva programación y nutrirla con talento. Ahora trata de mantener a la organización en la cima expandiéndose con base en nuevos proyectos y plataformas.

Hace casi 40 años, en un barrio habitado en su mayoría por trabajadores irlandeses en Scranton, Pennsylvania, Judy McGrath se enamoró de la música. Mientras su padre, Charles, intentaba que su niña escuchara a Duke Ellington en el estéreo, ella prefería a los Rolling Stones y más adelante a Neil Young. Fue en el ambiente progresista que reinaba dentro de su pequeña casa en la calle Orchard, que Judy comenzó a imaginar una vida más allá de Scranton, en Nueva York. “Se sentía como una tierra lejana” recuerda. “Nunca estuve ahí hasta que vine a buscar trabajo. Parecía imposible, como si quisiera pertenecer a una tribu.Así que tuve esta idea de escribir acerca de la música. Sería el trabajo ideal para mí”.

La operación de 17 mil mdd que encabeza es una colección de algunas de las marcas más reconocidas en el negocio, desde el MTV original hasta Nickelodeon, desde VH1 hasta la Comedy Central. Sus programas son vistos en 169 países y en 28 idiomas. Bajo su administración surgieron iconos como Bob Esponja, los enanos de South Park y el comediante Jon Stewart. En la noche sale a escuchar alguna banda nueva o se queda en casa y se mete a los blogs de patinetas. O quizá meriende con el vocalista de REM, Michael Stipe.

El año pasado, Bono agradeció a McGrath durante los conciertos de U2 por el apoyo recibido a sus campañas contra el VIH y la pobreza en MTV. Y en un giro simpático, ella y el fundador de la revista Rolling Stone, Jann S. Wenner, cuyos artículos idolatra, llevan una buena amistad.


Bibliografía: La dinámica de la comunicación masiva, Dominick Joseph R., Editorial, Mc Graw Hill, octava edición.

miércoles, 20 de junio de 2012

¿Cómo se conocen las audiencias de televisión?


Prácticamente todo el mundo se ha preguntado alguna vez como pueden saber las televisiones con tanta certeza las audiencias que tienen los programas de televisión. Parece algo sencillo para los que controlan este volumen de espectadores a un programa en concreto y descubrir el “share” que tienen sobre otros programas que se están emitiendo a la misma hora. 

Lo cierto es que existen varios métodos para hacer esta valoración, pero hablaremos de la más popular y la que más se utiliza en varios países, y la que parece ser la más fiable a la hora de acertar con las cifras. Dicho en otras palabras, veremos cómo se calculan las estadísticas por porcentaje -  la misma técnica que se utiliza en muchos sitios para calcular el número de posibles votos en unas elecciones.

Esta técnica consiste en crear una “audiencia de referencia”, y luego verificar cuantas personas de esa audiencia ve cada uno de los programas que hay en televisión. Entonces se debe extrapolar las cifras conseguidas y estima el número de televidentes en la total población viendo un programa. Esto es una manera simple de explicar lo que es un proceso complicado y extenso. 

Este sistema se basa principalmente en información recolectada de unos medidores instalados en los televisores, y entonces combina esa información con grandes bases de datos del programa que aparece en cada estación de televisión (y televisión por cable si hiciera falta).


Bibliografía: La dinámica de la comunicación masiva, Dominick Joseph R., Editorial, Mc Graw Hill, octava edición.

lunes, 18 de junio de 2012

Producción de programas televisivos.


Las tres formas básicas de programas televisivos son los de ficción, no ficción y programas en directo. Los programas de ficción son sobre todo series de sobremesa, comedias de situación, series dramáticas y películas para televisión, incluyendo las mini series (una película en varias partes). Los programas de no ficción más habituales son los concursos, debates, noticiarios y magazines (espacios informativos que se nutren de noticias variadas dentro de un formato que busca el entretenimiento). 

La televisión en directo se limita generalmente a los deportes, entregas de premios, cobertura de noticias en telediarios y algunos espacios diarios de testimonios o debates.

La mayoría de programas de televisión están producidos por compañías ajenas a la cadena que los emite, a la que venden los derechos de emisión. La cadena financia la producción vendiendo espacios publicitarios.

El diseño y producción de las imágenes en televisión corresponde hoy día a un esquema estandarizado y aceptado convencionalmente en todos los países. La operación de los instrumentos necesarios para poner en funcionamiento una estación transmisora, exige la colaboración continua y sincronizada de un numeroso equipo humano, entre profesionales, técnicos y personal administrativo. Todos con un objetivo común: lanzar al aire una señal electromagnética que contiene información codificada, la cual al ser captada por un receptor dará como resultado un programa de imagen y sonido, cuya duración puede abarcar las 24 horas del día.

Todo comienza en un espacio especialmente construido y acondicionado para evitar interferencias por el ruido de la calle y por las condiciones variables de la luz natural. Un estudio de televisión es un espacio cerrado que dispone de un sistema de iluminación artificial compuesto de reflectores de alta potencia, capaces de iluminar un área de varias docenas de metros cuadrados y, en algunos casos, espacios tan grandes como el de un auditorio con cupo para cientos de personas.

Con un micrófono muy sensible colocado en una barra móvil (boom) que pende sobre las cabezas de los actores. El audio también puede registrarse con pequeños micrófonos (levaliere) prendidos en el vestido de los actores. En el foro intervienen, además de los camarógrafos, iluminadores, sonidistas, tramoyistas, apuntadores, escenógrafos y otros técnicos especializados. Toda la actividad del foro la conduce y organiza un jefe de piso (floor manager) quien, a su vez, recibe instrucciones desde la cabina de control.

La imagen registrada por las tres cámaras se envía por medio de cables al interior de una cabina, desde donde se conduce la acción del foro. Las señales de video de las tres cámaras se reciben en una consola mezcladora (mixer), que opera un técnico (switcher). Éste observa las tres imágenes en tres monitores de televisión, las selecciona y las mezcla, estableciendo el orden en que serán grabadas o enviadas al control central para su inmediata transmisión. El switcher es el encargado de dar indicaciones a los camarógrafos de cómo y cuándo emplazar las cámaras y de efectuar los encuadres precisos.

Desde la cabina del estudio se controla también la iluminación y la inserción de fondos musicales, de fotografías fijas (stills) o de películas filmadas que complementen la transmisión en directo. El sonido que proviene del estudio (audio) se acopla a una consola independiente del video. En la consola, el audio se puede modificar (distorsionar, amplificar o mezclar), o añadirle un fondo musical para conferirle un carácter particular.

La tarea de control de sonido la realiza un operador de audio, quien se encuentra en el interior de la cabina junto con el responsable de la producción del estudio: el director del programa. El director es el profesional que cuenta con mayor experiencia y puede resolver y conducir toda la actividad técnica y artística. Éste se apoya en un asistente de dirección, quien se encarga de la ejecución del guión y de algunos aspectos de la producción.

Pero la aportación más asombrosa es la aplicación gráfica de los equipos computarizados. Es el caso del Chyron, un generador digital de barras, líneas y gráficas en movimiento, con texturas y colores, o el Mirage, que puede distorsionar esféricamente o colocar en perspectiva una imagen fragmentándola en pequeños cuadritos. La utilización de los equipos de cómputo es indispensable. Un ejemplo representativo de estos instrumentos es el lápiz y la paleta electrónica, conocidos comercialmente como Paint Box.

Este aparato es capaz de estructurar cualquier figura geométrica regular o irregular y "pintarla" con una gama de 16 millones de colores (variando matices, tonos, saturaciones, brillo, color, contraste, etcétera). También es posible animar tales figuras, pintar o borrar secciones, cuadro por cuadro (un segundo de video tiene 30 cuadros), e incluso se puede separar cada punto de la estructura visual del monitor (pixeles) y darle un tratamiento de forma, color y volumen con un alto grado de definición.

El equipo de producción para un programa de televisión está formado por personal creativo como actores, guionistas, directores y productores, además de una plantilla técnica de operadores de cámara (véase Fotografía), electricistas y técnicos de sonido.

El productor ejecutivo es el responsable absoluto del proyecto y habitualmente es quien concibe la idea y se encarga de venderlo a las cadenas; debe responder del presupuesto y todo el equipo creativo, incluidos el director, guionistas y productor en línea, además de los principales protagonistas del reparto. El productor en línea, subordinado al productor ejecutivo, se encarga del plan de rodaje, presupuesto, personal y todos los aspectos logísticos de la producción.

El guionista o guionistas desarrollan los guiones de cada capítulo. A menudo trabajan durante la preproducción y los ensayos para corregir los problemas que pudieran encontrar los actores o directores o revisar el guión por problemas de presupuesto o producción.

El director, a las órdenes del productor ejecutivo, ayuda a elegir actores, localizaciones y el aspecto del diseño visual de la producción, como el vestuario. Además, el director se encarga de los movimientos de la cámara y es responsable de la interpretación de los actores. Después del rodaje edita la cinta en vídeo, a esto se le conoce como montaje del director.

Los actores trabajan bajo las órdenes del director para dar vida a un personaje. Son elegidos por el productor, la mayor parte de las veces mediante una serie de pruebas. Una vez contratados, memorizan su parte del guión y habitualmente participan en ensayos previos al rodaje o grabación del programa. La figura del presentador es propia de los programas informativos, deportivos y de debates; en algunos casos aportan comentarios en directo, otras, sobre todo en el caso de los informativos, leen los contenidos en tarjetas o en un aparato llamado TelePrompTer, que muestra las palabras en una pantalla.

El jefe de producción es responsable de todos los elementos físicos de la producción, como el equipo, el personal o las localizaciones. Los ayudantes de dirección dependen del director y se encargan de organizar el set, los extras y cualquier otra cosa que pueda necesitar el director. El director de fotografía, que opera la cámara, se ocupa de la iluminación y el movimiento de la cámara.

El director artístico, responsable del diseño de producción, dirige el diseño, construcción y acabado de decorados y vestuario; a menudo tiene bajo su responsabilidad a maquilladores y peluqueros. El operador de cámara maneja la plataforma móvil que sujeta la cámara (dolly) y otros instrumentos de apoyo, como los soportes que se utilizan para fijar la cámara a coches o grúas.



Bibliografía: La dinámica de la comunicación masiva, Dominick Joseph R., Editorial, Mc Graw Hill, octava edición.

miércoles, 13 de junio de 2012

Televisión de Valores


La televisión es el medio que cuenta con mayor audiencia, pero antes de contribuir al desarrollo cultural, social, económico y personal de sus perceptores, les distrae de tareas más alentadoras, mientras mayor sea la educación menos se ve televisión.

Los efectos que ejercen la televisión verán en grado y calidad, en distintas áreas, pueden ser meditados o inmediatos. Tal efecto se puede estudiar a dos niveles; Sentido General y Limitado. El Sentido General se refiere a la acción en la cual no puede ser concretada a ningún área específica. En Sentido Limitado los procesos que se desarrollan en la fase postcomunicativa como consecuencia de la comunicación colectiva, y por otra parte en la fase comunicativa propiamente dicha, a todos los modos de comportamiento que resultan de la atención que presta el hombre a los mensajes de la comunicación colectiva.

Todos los medios de comunicación son utilizados con efectos pocos productivos para lograr desarrollar el potencial cultural de nuestros pueblos. No se trata solo de comunicar, sino de controlar las reacciones del receptor.

Los efectos pueden ser considerados:
  1. Según temporalidad: mediatos e inmediatos
  2. Según las consecuencias: positivos y negativos
  3. Según la intensidad
  4. Según el área de acción: sobre el comportamiento, saber, opiniones y aptitudes.
La televisión es una gran ventana al mundo que se abre con sólo pulsar el botón del mando a distancia. Cuenta con gran cantidad de seguidores al proporcionar entretenimiento y ocio de forma gratuita y rápida en el salón de casa (su fácil acceso determina una serie de ventajas pero también de peligros e inconvenientes).

Los adultos tienen la madurez suficiente como para valorar críticamente la programación diaria de las diferentes cadenas, sin embargo, los niños y adolescentes necesitan una orientación para no confundir en algunos casos aquello que se les muestra con la realidad.

A veces debemos ir más allá de lo aparente para alcanzar la verdad.


 La televisión por su gran capacidad de influencia debería utilizarse de forma adecuada para educar y transmitir valores, sin embargo, el término valor está muy desvirtuado hoy día por culpa del llamado “relativismo ético” en la sociedad del “todo vale” que está empezando a producir sus consecuencias, por ejemplo, en la situación que se respira en las aulas (hoy día, los docentes son un colectivo con clara tendencia al estrés y la ansiedad).

Educar es fundamental para transmitir valores adecuados, orientar y contribuir al desarrollo del sentido común que en ocasiones parece perdido.



Bibliografía: La dinámica de la comunicación masiva, Dominick Joseph R., Editorial, Mc Graw Hill, octava edición.

lunes, 11 de junio de 2012

Controversia Social







La televisión es un elemento de información, de compañía y es un gran medio de entretenimiento y educación, pero también es el chupete electrónico favorito de generaciones enteras. La importancia y la presencia de la TV en nuestras vidas puede estar un tanto elevada, por eso es importante colocarla en su lugar adecuado: como un aparato de uso, y no como un dominante cultural.
 

Hoy vivimos insertos en una comunidad cuya actualidad pareciera reflejada a medias por la tele. Sentimos que nos estamos perdiendo de vivir nuestra realidad si no estamos atentos a la pantalla, conociendo cada chimento, pelea, unión y comentario emitido por medios electrónicos. Y seguro que la TV es un medio de información y de conocimiento de la realidad, pero es sólo eso: un medio, y no un impositor de opiniones. Podemos vivir sin televisión, eso es algo que debemos recordar, para apreciarla en los momentos en verdad de interés y no como una constante presencia fantasmagórica en nuestras existencias. Pero también podemos elegir qué ver y qué no ver, y no caer siempre en los programas que son mas consumidos por la sociedad sólo por el hecho de que todo el mundo habla de ellos.

Lo importante de todo esto es tomar conciencia que lo que se muestra en TV no siempre es la verdad absoluta, porque como en la tele los tiempos corren, el periodista siempre debe escoger difundir cierto tipo de información por sobre otra. ¿Qué pasa entonces si los robos y asesinatos ocupan 25 minutos en un noticiero, y una obra de beneficencia solo 2 minutos? ¿Eso quiere decir que hay mas asesinatos que obras de beneficencia? Claro que no, lo importante es saber interpretarlo como una realidad parcializada.

Podemos convivir con los noticieros, si los tomamos como una herramienta: son programas que nos muestran una realidad que pudiera estar más o menos cerca nuestro. Podemos ver un noticiario y exclamar barbaridades, y terminar por cambiar el canal, aunque mucho mejor sería prestar atención y razonar lo visto, aprender lo que es de utilidad, y desechar el resto. Podemos incluso ver muchos noticieros, y comparar las informaciones de cada uno de ellos, para poder hacer una apreciación consciente de lo que ocurre a nuestro alrededor. Esta sería una meta ideal: no absorber como esponjas, sino interpretar lo observado, filtrarlo, y evaluar por nosotros mismos cómo afectará nuestra vida y qué podamos hacer al respecto de lo que creamos inconveniente.

Pero más allá de la interpretación que hagamos, debemos restarle importancia a la TV en nuestra vida, y para ello podemos reemplazarla por otros entretenimientos. Compartir personalmente tiempo con amigos, practicar deportes, incluso escuchar música pueden restar relevancia a los culebrones y chimenteros programas vespertinos, por ejemplo. Los noticieros son interesantes, pero también lo son los diarios y, fundamentalmente, el salir a la calle y aprender la realidad por nosotros mismos.

Si posees sistema de televisión por cable y televisión satelital, tendrás acceso a una grandísima variedad de señales. Tanta oferta puede terminar por confundir, pero a veces no se escogen otras opciones porque no se conocen. Entonces, dedica una porción de las horas a buscar programas de un género en particular. Por ejemplo, un dia las señales de música, otro día las de cocina, y otro los documentales. Seguramente encontrarás una temática que te interese o una serie que puedas ver semanalmente, en lugar de estar pendiente de las ultimas y sangrientas noticias.

De ninguna manera decimos que la TV es nociva, sino que debemos recordar que se trata de un aparato electrónico más de los que tenemos en el hogar. Así como no permitimos que la licuadora frene nuestras charlas de sobremesa, de igual modo debemos aprovechar la televisión para informarnos, para aprender y educarnos, y también para entretenernos… siempre sabiéndole dar un lugar no protagónico en nuestra dinámica familiar.

Recuerda, el control remoto esta en tus manos, no en el rating ni en el tema recurrente de tus compañeros de trabajo o amistades. Busca otras opciones, y seguramente tu experiencia con la Televisión será mucho mas satisfactoria.


Bibliografía: La dinámica de la comunicación masiva, Dominick Joseph R., Editorial, Mc Graw Hill, octava edición.